El efecto positivo de las intervenciones disminuye en el tiempo y a partir de unos meses la contribución marginal, de estas medidas restrictivas, comienza a debilitarse. Las personas empiezan a incumplir las restricciones, lo que se ve reflejado, entre otras cosas, en un aumento en el índice de movilidad. En parte, esto podría explicarse por un fenómeno que se denomina fatiga pandémica.